ABORTO
Los escritores cristianos de los primeros siglos afirmaron que “el feto no es parte de la madre sino que es un ser con alma, por esta razón los grandes escritores de la Iglesia de aquellos tiempos, como Gregorio Niceno, San Cipriano, Tertuliano y otros, opinaron que la muerte del feto es siempre homicidio y como tal debe ser castigado”. Es histórico el debate sobre la legalización del aborto en el Congreso de la Nación. Uno de los testimonios que conmovió por lo crudo y auténtico, frente a los legisladores, fue el de la señora Lorena Fernández, residente en la Villa 31, quien exclamó que está en contra del aborto y desafió a los presentes a que vayan a las villas y pregunten a cada mujer pobre si está de acuerdo con el aborto. Además expresó: “Estoy cansada que todas (las que promueven el aborto) se cuelguen de nosotras que somos pobres, humildes. Soy de la Villa 31 y muchas como yo pensamos que un aborto es matar. Todas tenemos más de un hijo; yo tengo cuatro. Tengo una hija de trece años; su papá (yo me casé con él) me pidió que aborte. Fui a una clínica y le dije a la doctora que no quería abortar, que ya había abortado a los 16 años, mis propios padres me lo pidieron”. A su tiempo, la abogada María Elena Barbagelata expresó: “Penar implica considerar a la mujer no como un sujeto de derechos sino como una cosa, otros deciden por ella. Penar es discriminatorio. Penar no previene la interrupción del embarazo sino todo lo contrario. Lo que se castiga es la decisión de no querer ser madre”. Luego habló el médico Mario Sebastiani, del área de Ginecología y Obstetricia del Hospital Italiano; dijo: “Si existe el derecho a tener hijos, debe existir el derecho a no tenerlos”, opinó, y agregó: “Un aborto en el primer trimestre es 14 veces menos riesgoso que un embarazo y un parto”. Por primera vez en la historia, los proyectos para la interrupción voluntaria del embarazo comenzaron a ser debatidos. La Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José de Costa Rica aprobado por Ley Nacional 21.054) art. 4º, inc. 1º establece: “Toda persona tiene derecho a que se respete su vida. Este derecho estará protegido por la ley y, en general, a partir del momento de la concepción. Nadie puede ser privado de la vida arbitrariamente”. Es un tema muy difícil de opinar y que no hay que esquivar; hay que discutirlo, sabiendo que en la Argentina existen abortos ilegales. El aborto ilegal les ha costado la vida a muchas mujeres, es una discusión que hay que poner sobre la mesa”. En definitiva, hay un conflicto de derechos muy difícil de lidiar: el de la mujer y el derecho a la vida.
Julio Argentino Gómez
julioargentino2@arnet.com.ar
LUCHAR POR LA VIDA
Comparto con el lector Bravo las expresiones vertidas en su carta “Aborto II” (12/4): “…qué pasa con todos esos niños que, recién nacidos, o los que transitan sus primeros años de vida, carecen de las necesidades elementales: comida, ropa, asistencias necesarias normales, una familia que los contenga y eduque, una sociedad que no los rechace, sociedades y gobiernos que adviertan que existen…”. No obstante, en nuestro medio trabaja comprometidamente muchas personas, instituciones y la Iglesia, que realizan acciones en la medida de sus posibilidades para aliviar en esos niños aquellas necesidades elementales. Sería una gran oportunidad para que la sociedad en general, y nosotros como sus integrantes en particular, nos involucremos activamente en ayudar a esos niños; amén de trabajar enérgicamente para modificar los comportamientos gubernamentales y sociales con el fin de lograr implicarlos en este compromiso.
Luis Vides Almonacid
luis.vides.almonacid@gmail.com
ÁRBOL COMPROMETIDO
Pedimos al secretario de Servicios Públicos de la Municipalidad que se dedique a trabajar sobre el árbol que está a la par de la Casa Sucar (calle Salta al 500, acera oeste). El citado funcionario siempre se destacó por su predisposición a la tala (de árboles en deficientes condiciones de su estabilidad) en la Capital tucumana. Lamentablemente nunca, o por lo menos que se lo sepa, se hizo un relevamiento de especies o árboles en mal estado para reemplazarlos o podarlos según el caso. Este árbol se encuentra en calle Salta al 500, a la par de la tan disputada Casa Sucar; en la actualidad está hueco en su interior y sigue creciendo hacia arriba. Sería importante que el intendente se haga eco de esta situación, ya que los ambientalistas sólo estamos alertando; más vale prevenir.
Pedro Martínez
concienciambientaltuc@hotmail.com